SILVIA: Silvia es una chica muy sencilla, comprensiva. La gusta estar con la gente para que la ayuden, y así soy yo. Yo te lo digo poco porque así soy yo.

ANGELA: Así te describes.

SILVIA: Sí, así me describo.

ÁNGELA: Muy bien. Y Silvia, ¿tú dónde naciste? ¿ dónde te criaste?

SILVIA: Nací en Guinea Ecuatorial, con mis padres. Y así nací con mis padres, nací en Guinea Ecuatorial. Una familia con muchos hermanos porque mi padre tuvo muchas mujeres. Luego tengo bastante familia.

ÁNGELA: Familia extensa.

SILVIA: Sí, sí, sí, tengo bastante familia. Y así.

ÁNGELA: ¿Y cuál es la decisión que a ti te hizo migrar?

SILVIA: Pues la decisión que me hizo migrarme fue la siguiente. Es que tuve, por desgracia lo llamaría yo, una enfermedad que no se podía... se cura en mi país pero hay momentos que... la medicación te puede ir bien a ti, y a mí no. Por eso vine, me migre, vine acá en Santander para ver si es aquí donde puedo estar bien. Seguir con mi vida normal y corriente.

ÁNGELA: Claro.

SILVIA: Y así, por eso me migre, sí, sí.

ÁNGELA: ¿ Y qué tal, recuperaste a nivel de salud?

SILVIA: Sí, sí, estoy muy recuperada, muy contenta, y así.

ÁNGELA: ¡Qué bien !

SILVIA: De estar en mi país ya decimos otra cosa ¿ sabes? Ahora me siento con más años de vida por delante, que en mi país, yo ya no existiera. Ya si no yo no sigo viva diría yo. Y así. Porque muy poca, poca medicación, tratamiento, y poco atendimiento ¿ sabes? Es así en plan, por eso me migra y estoy muy contenta y feliz.

ÁNGELA: ¡Qué bien Silvia!

SILVIA: Se me nota la cara, que estoy bien.

ÁNGELA: Que recuperaste.

SILVIA: Sí, de todo lo que tengo me lo he recuperado. Hago vida normal, hago lo que puedo y así.

ÁNGELA:¿ Y esta decisión de venir a Santander, fue motivada por algo? ¿ Por qué acabaste en Santander?

SILVIA: Porque en 2007 tuve mi segunda hija, ya que tengo tres hijos. Ahí me diagnosticaron la enfermedad, vine, me fui, traje a la niña. Nos hicieron todo, dijeron que la niña estaba bien, que yo sí tenía problema. Ahí nos indicaron que hay buenos médicos en Santander y así me vine, y hice un poco de tratamiento, porque en ese tiempo yo no me lo creía que tenía tal cosa. Me fui, volvi a quedarme embarazada, de esta con quien estoy aquí ahora. Nos fuimos donde mi hermana en Marbella, para dar a luz, y los problemas seguían. La enfermedad se me vino todo, todo, todo. Ahí los del hospital Costa del Sol de Marbella me mandaron donde los médicos de aquí, que aquí es donde se...

ÁNGELA: Había un buen tratamiento.

SILVIA: Sí, sí, había un buen tratamiento. Miraron a la niña, la niña otra vez  bien, pero yo con la misma, con la misma patología, y así. Por eso decidí quedarme a por el bien de mi salud y a por el bien de mis hijos, así.

ÁNGELA: Y en este momento que me cuentas estabas con tu hermana en Marbella ¿no? Que no estabas sola...

SILVIA: Sí, sí, sí, estuve con mi hermana en Marbella.

ÁNGELA:¿ Que ella había migrado igual antes que tú?

SILVIA: Hace tiempo, hace tiempo. Sí, sí, sí, hace tiempo que mi hermana vino aquí a migrarse aquí en Marbella. Que se mudó a Marbella. Y yo  una vez quedarme así digo, mi hermana me dijo, ven a parir aquí a ver si la cosa es cierta o no, y la cosa volvía a repetir, y así. Ya sabes que todos los médicos tienen comunicación. Y una vez que llegué el médico ya me esperaba y llevaron a la niña, la hicieron todo el chequeo, y la niña resultaba  negativo, negativo. Y yo con lo mismo de siempre. Así.

ÁNGELA: Y ahora las dos estáis bien. ¡Qué bien!

SILVIA: Sí, sí, sí, yo estoy bien gracias a Dios.

ÁNGELA: ¿Y de qué manera las fronteras o las políticas migratorias en España han impactado en tu experiencia?

SILVIA: Nada de eso me ha impactado porque sabes que cuando estás en un lugar así, sabes como que tienes que comportarse. Esto no lo debo de hacer, para evitar un mal mayor. Debo de comportarse, debo de comportarme como una persona adulta ya. Porque si empiezo hago eso, hago eso, empiezan las cosas malas. 

ÁNGELA: Y cuando llegaste tuviste alguna dificultad, igual por no tener la situación administrativa regular, o ya llegaste con permiso...

SILVIA: No, nada. Sabes que para Guinea Ecuatoria, para mi país, para viajar hasta España cogemos un visado. Sí, sí, tienes que coger un visado en el consulado, y ahí  te lo dejan y viajas para unos días, pero es muy costoso coger el visado.

ÁNGELA: Claro.

SILVIA: Te dicen de llevar tanta documentación hasta que… si eres así.. puedes decir vaya no lo haga. Lo voy a dejar porque tanto papeleo no puedo más, y porque quieres y sabes que tienes algo importante para hacer, que te puedan parecer bien, tú vas a estar ahí. Te piden ese papel, tú lo vas a coger y lo enseñas y así. 

ÁNGELA: Esto que me cuentas de todo el papeleo entonces fue antes de venir.

SILVIA: Sí, sí, antes de venir tienes que hacer el papeleo, sí, sí. Una vez que te dejan el visado ya puedes viajar normalmente.

ÁNGELA: Y claro cuando llegas a España y se extingue ese visado, pediste la residencia...

SILVIA: Sí, sí, pero cuando lleve a la niña en mi país… allí me quedé con la Trabajadora Social del hospital, diciéndome hija mía no te vayas, porque tú no sabes lo que te puede ir a pasar. Ahí la prometí que iba me iba a volver otra vez. Que me iba porque era por el problema del visado, que te dan 90 días. Si sobrepasas cuando vas a volver, cuando vas para pedir otra vez el visado te deniegan el visado. Y eso la dije,: "puedo firmar que voy a venir para continuar con el tratamiento”. Me dijo: "no, al ver que dices así está diciendo la verdad”. Me fui, hice solo un mes, volví a pedir el visado, volví a entrar otra vez. Al llegar ya sabes que cuando llegas no tienes nada, ni dónde quedarte. Fui a quedarme donde una amiga. Me busco la habitación y estuv con mi hija. Y ahí me acordé que me quedé, me he quedado con una Trabajadora Social del hospital. Fui con la niña, entre, ya la iba buscando y al entrar en otro sitio ya la reconocí por la espalda, y la llamé se dio la vuelta y dijo " Ay mi niña " Yo te dije que iba a regresar y he venido para siempre. Y así ella se puso contento de haber cumplido con mi palabra  ¿sabes? Y ahí empezamos con las ayudas, de cuidar a la niña... Ya sabes cuando un inmigrante se va a un país que no es el suyo, y encuentras a la gente que te quieren un montón, te ofrecen varias ayudas para que estés bien estabilizado, sí, sí, sí.

ÁNGELA: Y cómo es esa experiencia, de... toda esa infancia que has vivido en Guinea, y ahora vives aquí, cómo es vivir entre, estar en esa emoción que está en un lugar y en otro.

SILVIA: ¿ Sabes? Tú lo tienes que... Es como una balanza. Es como una balanza que tú misma puedas saber balancear una cosa. Cuando estoy en mi país estoy con la balanza baja y cuando estoy en España la balanza la tengo muy alta. Y ahí lo equilibras tú misma o tú mismo y es así. A mí me encanta vivir aquí ya últimamente.

ÁNGELA: Claro, porque entiendo que es un proceso también...

SILVIA: Sí, sí, sí, para mi propio bien. Porque de ser otra persona diría me voy me da igual, no pero yo quiero vivir la vida, tal como se dice a vivir la vida. La quiero vivir, la quiero disfrutar con mis hijos viéndolos crecer,  y así.

ÁNGELA: ¿Sólo es una no?

SILVIA: No, tengo tres hijos.

ÁNGELA: Digo solo es una vida...

SILVIA: Es una vida, la vida es una.

ÁNGELA: ¿Y desde tu punto de vista, qué saberes y que experiencia aporta la migración?

SILVIA: La migración te aporta saber cosas nuevas, ver cosas que no has visto nunca. Te enseña cosas para que las sepas hacer, y así. Porque yo hablo de mi caso. Hablo de mi caso particular, y no de otra persona. Yo dirás que yo lo paso bien dentro de lo que cabe. En  mi caso. Sí.

ÁNGELA: Bueno, y también para las personas que somos de un territorio, y cuando viene gente de otra cultura y de otra realidad también enriquece ¿no? porque se puede aprender bastante de otras formas de ver el mundo, de otras formas de experimentar las cosas, de las emociones..Pero es de ida y vuelta.

SILVIA: Sí, sí.

ÁNGELA: Y para ti Silvia, qué implica ser una mujer migrante de Guinea en Santander, ¿ cómo lo has vivido?

SILVIA: Pues tan mal no lo he vivido, tampoco me ha sido un camino de rosas. Porque migrar con una niña de un año y medio, si estás ahí, que estas encima de ella, verla, poder estar tranquila una vez que estas con ella, y así. Me ha sido difícil porque nunca he criado a ninguno de mis hijos. Y cuando me tocó criar a la que tengo aquí me resultaba muy difícil, de estar lejos y no ver a mi madre, de que mi padre ya se murió. No ver a mis hermanos, estando sola, y es la primera vez que vivo sola sin mi familia. Me resultó muy difícil, y  así.

ANGELA: Porque entiendo que con tus otros hijos tu familia ayudaba con la crianza ¿no?

SILVIA: Sí, sí, por eso la gente piensa que solo la tengo a ella. 

ÁNGELA: Y están con tu familia...

SILVIA: Sí, están con mi familia, sí.

ÁNGELA: Claro y sigues ligada a tu familia que está allí.

SILVIA: Sí, sí. Hablamos siempre y les cuento, pues mira lo que he hecho hoy. Acabo de empezar en un trabajo, a trabajar. No me ha sido fácil, que todo hay que tener paciencia, que cada cosa viene a su momento. No que ya sabes que hay alguna gente que cuando vienes, piensan que ya lo tienes todo. Y no es así, no es así. Sí, es un proceso de estar sola, sin ver a mi madre, sin ver a mis hermanos, sin ver a ninguna… a ninguno de mi familia. Para mí me era como una gota de agua en la cabeza porque desde que nací nunca me he separao con mi familia. Solo ese problema de salud si me ha hecho separarme de mi familia.

ANGELA: Claro, que no fue elegido.

SILVIA: No, no.

ÁNGELA: ¿Y aquí Silvia hiciste alguna red? ¿ Algunas personas que te apoyasen un poco con toda esta novedad de llegar a un sitio nuevo, de estar con la pequeña?

SILVIA: Iba a las asociaciones. En Cruz Roja me ayudaron mucho, eh, en eso, en Cantabria Acoge, la abogada que me acogió muy maja conmigo, y así hasta que fui donde Carmen, que es con la... con ella estoy ahora muy bien.

ÁNGELA: ¡Qué bien!Es importante tener a alguien que nos ayuda un poco con los trámites ... 

SILVIA: Eso mismo.

ÁNGELA: Porque es difícil ¿verdad? 

SILVIA: Difícil hacerlo sola. No sabes ni dónde empezar. Uf....

ÁNGELA: Muchos papeles, sí, pero para eso están las profesionales de trabajo social, para apoyar con todas esas cosas. Y bueno, hay alguna otra cosa que no hayamos hablando que a ti te gustaría compartir... No sé alguien igual que acaba de migrar, qué les dirías.

SILVIA: Pues les diría que nadie se desanime, que las cosas vienen, cuando dios ya te dice: “que mira que eso ya es tuyo” Que nadie se desespere, porque tú no sabes lo que puedes tener el día de mañana. Que tengan animo de seguir, y así.